Reunión del Consejo en medio del bloqueo

Layhoon Chan y Javier Solís participaron desde el hotel de Suiza de forma telemática: también entró el hijo de Lim y se trataron tanto temas financieros como los casos judiciales abiertos

Corona, Solís y Layhoon viajaron a Suiza con el resto del equipo, donde están planificando esta temporada.

Corona, Solís y Layhoon viajaron a Suiza con el resto del equipo, donde están planificando esta temporada. / JM LOPEZ

Andrés García

Andrés García

El Consejo de Administración del Valencia se reunió este lunes por la mañana de forma telemática para abordar la actualidad del club. La reunión, que se celebra cada tres meses, coincidió con el ‘stage’ de Suiza. La presidenta Layhoon Chan y el Director Corporativo Javier Solís participaron en la reunión desde el hotel de concentración de Saint Gallen. De ahí, la ausencia de ambos en el entrenamiento matinal del equipo. En el consejo participó también el hijo de Peter Lim, Kiat Lim, y se trató el tema económico y financiero, los casos judiciales abiertos, la situación del nuevo estadio y sobre todo la parcela deportiva a poco más de un mes para que se cierre el mercado de fichajes. La fotografía del Valencia, como reconoce el propio club, preocupa.

La principal razón es la caída de ingresos y la necesidad de equilibrar los gastos para que el club siga siendo sostenible. La crisis financiera es tan grave que el máximo accionista, aún vendiendo jugadores este verano, se plantea la necesidad de poner más dinero como salvavidas de urgencia (no como inversión), cuando meses atrás se habló de que se habían equilibrado las cuentas con las ventas importantes del verano pasado. La delicada situación económica obliga al club a vender jugadores para buscar el equilibrio económico y, al mismo tiempo, regenerar el equipo. El club asume que tiene que vender y que Giorgi Mamardashvili y Yunus Musah podrían ser traspasados, pero no está dispuesto a vender a cualquier precio. Si no se ha llegado a un acuerdo por el estadounidense es porque no ha llegado la «oferta correcta».

El Consejo también se puso al tanto del capítulo de salidas. El club ha avanzado en algunas negociaciones, pero ninguna de ellas está cerca de concretarse. Ninguna es cuestión de horas ni de pocos días. El club asume que habrá que esperar y tener paciencia. En este sentido está tranquilo porque, según ellos, en todo momento han sido transparentes con Rubén Baraja. Los descartados Edinson Cavani, Marcos André, Samu Castillejo, Eray Cömert y Uros Racic se incorporarán al grupo el jueves aunque el sábado vuelvan a quedarse fuera de la lista para el amistoso contra el Alavés.

El escenario no cambia. Hasta que no se produzcan salidas no va a llegar ningún futbolista. El Valencia, de hecho, ahora mismo no se plantea cerrar ninguna operación por avanzada que la tenga. Ahora mismo no puede inscribir ningún a ningún jugador nuevo. El club no habla de objetivos deportivos: para la propiedad el de esta temporada es crecer y mejorar. Y todo pasa por armar un equipo competitivo. El club entiende que tiene buenos jugadores, pero que la temporada pasada hubo un problema de mentalidad. Es por esa razón por la que se busca jugadores con «carácter» que se ajusten el perfil deportivo que busca Baraja dentro de las condiciones económicas impuestas por el máximo accionista.

A nivel social, Lim es conocedor del ambiente de protesta que se vive en la ciudad. Su única respuesta es «trabajar» y tratar de hacer un club sostenible y un equipo competitivo. Por cierto, Peter sigue sin hablar con Baraja a pesar de la permanencia y la renovación por dos temporadas. Para la propiedad no es necesario y menos ahora con la autonomía del Valencia de Valencia. Su viaje a València está descartado.

El tema estadio también estuvo en la agenda del Consejo aunque sin novedades. El club solicitó una reunión oficial con los nuevos responsables políticos de la ciudad y está a la espera de una respuesta. Los contactos formales han sido mínimos y, de momento, solo han habido palabras de cortesía. El club espera una fecha y sobre todo una respuesta al convenio: la piedra filosofal del proyecto. Para Meriton, el compromiso de acabar el estadio está demostrado porque ya han presentado toda la documentación requerida y porque no venderá Mestalla antes de haber acabado el nuevo.