Mendilibar llega al Real Valladolid tras un fugaz paso por la Primera División con el Athletic Club, al que entrenó durante las primeras nueve jornadas de la temporada que acaba de concluir. Su mayor logro lo consiguió con el Eibar de la temporada 04/05, equipo que realizó una gran campaña y con el que rozó el ascenso (acabó cuarto). El de Zaldibar llega a Valladolid acompañado del preparador físico Toni Ruiz, que está con Mendilibar desde su etapa en el Lanzarote.
TRAYECTORIA.
José Luis Mendilibar comenzó su carrera como entrenador en el Arratia, de Regional Preferente, durante las temporadas 94/95 y 95/96. De allí pasó a Lezama, donde dirigió al equipo cadete del Athletic Club durante la temporada 96/97.
La campaña siguiente entrenó al Baskonia, de Tercera División, con los siguientes números: 20 victorias, 11 empates y siete derrotas. En la liguilla de ascenso, logró cinco victorias y un empate. En la temporada 98/99, de nuevo al frente del Baskonia, acabó séptimo con 14 victorias, 15 empates y nueve derrotas.
En la 99/00 se puso al frente del filial rojiblanco, el Bilbao Athletic (Segunda B), finalizando octavo con 15 victorias, 10 empates y 13 derrotas. En la 00-01 regresó al Baskonia (Segunda B) cosechando 18 victorias, 8 empates y 14 derrotas, y finalizando sexto.
En la 01/02 dirigió al Aurrerá (Segunda B) logrando 12 victorias, 18 empates y ocho derrotas, para acabar clasificado en el octavo puesto.
En la 02/03 fue fichado por el Lanzarote, de Segunda B, donde permaneció dos temporadas en las que clasificó al equipo para la liguilla de ascenso.
En la temporada 04/05, se puso al frente de la SD Eibar, en Segunda División, donde realizó su mejor campaña, estando a punto de ascender a Primera División. El equipo armero acabó cuarto con 20 victorias, 13 empates y nueve derrotas.
En la 05/06 logró dar el salto a Primera con el Athletic Club, pero los resultados no le acompañaron. De nueve partidos de Liga, ganó uno, empató tres y perdió cinco, lo que provocó su destitución.
Como jugador, Jose Luis Mendilibar militó en las categorías inferiores del Athletic Club hasta 1982. De ahí pasó al Logroñés, equipo en el que jugó tres temporadas hasta que en 1985 fichó por el Sestao, equipo en el que permaneció durante siete temporadas. En su última campaña como futbolista en activo (93/94) militó en el Lemona.
