El ascenso exige olvidar los errores del pasado que ha cometido el Levante

La temporada del Levante UD es algo parecido al día de la marmota. El equipo ahora entrenado por Felipe Miñambres no termia de enganchase de lleno al ascenso, pero tampoco se descuelga por completo. Los diferentes resultados jornada tras jornada mantienen el conjunto granota a mitad de tabla, pero lo suficientemente cerca del Play-off de ascenso como para seguir soñando en que un esprint final de competición puede concluir con la fiesta del ascenso en Orriols. Para ello es imprescindible que el Levante corrija en estas últimas seis jornadas una lista de errores incompatibles con el ascenso. Empezando este domingo con solventar aquellos partidos ante rivales de la zona baja de la clasificación. Primera oportunidad: el Cartagena. 

El del Elche, el Sporting e incluso el del Racing de Santader han sido partidos que en las últimas jornadas han aportado argumentos suficientes para pensar en que los de Miñambre tienen herramientas suficientes para ascender. Sin embargo, esas grandes actuaciones contastan de sobremanera con los días del Mirandés, Andorra y Amorebieta, el más reciente de todos. Todos ellos han sido oportunidades de oro para que el Levante entre de lleno en la pelea, incluso la del ascenso directo hace algunas semanas, pero que el propio equipo granota se ha encargado de echar por la borda con errores propios que debe corregir. Ante el Mirandés y el Andorra, decimoséptimo y vigesimoprimero en la tabla actualmente, el equipo no pasó del empate. Frente al Amorebieta, que también ocupa puestos de descenso, el desenlace fue todavía peor: derrota en el Ciutat. 

Seis finales

Hasta el final de la competición, al Levante le queda medirse a Cartagena, Villarreal B, Eibar, Eldense, Alcorcón y Huesca. Salvo los de Ipurúa, serio candidato incluso al ascenso directo, todo rivales de la zona baja de la clasificación, y es que el Levante cuenta con uno de los calendarios más amables, a priori, de los equipos que están metidos en la carrera por la promoción de ascenso. Sin embargo, los precedentes obligan a pensar en que serán enfrentamientos más comprometidos de lo que pueda parecen en un principio, sobre todo porquer algunos de los rivales están en plena pelea por evitar el descenso a Primera RFEF. La principal asignatura, por tanto, radica en encontrar las soluciones necesarias para hacer frente a equipos que renuncian a la pelota, se encierran en su área y dominan a la perfección el otro fútbol, el del oficio. En cualquier caso, restan seis partidos y el Levante, aunque es decimoprimero en la clasificación, está a tan solo tres puntos de la sexta plaza que marca el play-off de ascenso. 

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